top of page

Conversaciones y Autoestima.


Quería comentar algo respecto a esa imagen en particular. Esta persona me habló y pensé: ¿por qué no? Hablarlo, pasarle mi número y que podamos ser amigos, compartir diferentes experiencias y aprender de alguien más, porque siempre todos llegan a enseñarme algo.

Lo siguiente que empezó fue que me hablara, diciéndome que le dé una oportunidad, que nos veamos y pidiéndome, casi como organizando algo que ni siquiera tuvo mi aprobación, teniendo planes para encotrarnos a lo que prefería ignorarlo y terminé de pasando de la persona, lo que provocaba más ansias de su parte y tal vez frustración.

Le terminé respondiendo sí o no, ni siquiera daba excusas. A lo que al final decía que por favor le dé una chance, que se tenía confianza y podíamos conocernos para salir y empezar una relación, diciéndome que se consideraba una linda persona pero que si yo conocía a alguien más o prefería otro tipo de belleza le dijera, a lo que le decía que no tenía intenciones o no entraba en mis pensamientos.

Esta fue la última conversación: la imagen y me había cansado, le puse lo que sentía y venía pensando, sin pintarsela o meter a alguien más, me hice responsable de mis deseos. Su respuesta fue simple, además de enojarse, bloquearme o eliminarme. No intenté más, no tenía ganas pero me hizo replantearme demasiadas cosas.

Primero ¿tan molesto es que alguien se enfoque en sí mismo? O es mejor mirar y apuntar con el dedo afuera, o decir estoy triste, estoy triste y elijo seguirlo así. Vamos che, somos grandes y conscientemente maduros para darnos cuenta que elegimos sentirnos mal o bien, me sigo preguntando: ¿cómo es que algo o alguien fuera de vos, hace que elijas estar de esa manera? ¿Tanto poder tienen personas/cosas externas? ¿Tan “moldeable” sos?

Segundo, a las pocas amistades que les compartí este tema tuvieron diferentes respuestas: me dijeron que tenía razón, que todos son iguales, que algunas personas son más pajeras que otras, y por último sólo lo haces porque te parecía una persona fea y no querías negarlo. Puede ser que sea todo pero para mí el tema fue más allá de eso superficial, que juicios y creencias impartidas por cada uno.

¿Tanto cuesta enfocarse en uno mismo? La respuesta es sí, porque tenemos miedo, miedo a lo que llegaremos a encontrar, a lo que descubriremos y el miedo a ser los protagonistas, los verdaderos dueños de nuestras palabras, acciones, pensamientos y emociones. Es demasiado fácil quedarse triste, y aunque suene duro todo son elecciones, que no seamos conscientes y que ese proceso vaya más allá de nosotros, pareciendo que es imposible elegir ahí tenés un problema y deberías buscar ayuda si querés mejorar. Cuesta eh, pero déjame decirte que todo está en vos, la decisión de avanzar o la sumisión de quedarse.

Sigo aprendiendo, me falta demasiado por trabajar y al mismo tiempo me doy cuenta que quiero cambiar, quiero elegirme, quiero amarme incondicionalmente. Y empecé a decirle a los demás, a expresarlo para que pueda tomar dimensión de eso.

En un tiempo tuve miedo, de por elegirme a mí, quedarme sola y esperar y esperar y cuando por fin encontrara a alguien, me dejaría de lado. Y el amor va más allá de eso, todo empieza por vos y termina ahí también, todo dentro tuyo.

Me di cuenta que si yo lo sentía para mí, estaría siempre rodeada de personas que me brindaran cariño y amor que necesitara, porque eso demostraba, eso comunicaba inconscientemente. Como escuché de alguien a través de un video que me compartieron hace tiempo: porque el amor es tuyo por siempre, incluso cuando no lo es. [1]

[1] Carolina Rovs.

-Rosario Alaniz.

[1] Carolina Rovs.

Comments


©2018 by Rosario Alaniz. Proudly created with Wix.com

bottom of page